cannabis 101

El cannabis es una planta que nuestros ancestros la han utilizado como una planta medicinal durante miles de años, atribuyéndole propiedades analgésicas, desinflamatorias, relajantes y psicotrópicas, es por esto que se sigue utilizando en todo el mundo. Hoy en día sabemos que estas propiedades son gracias a los fitocannabinoides que interactúan con nuestro sistema endocannabinoide, principalmente por los compuestos conocidos como CBD (Cannabidiol) y THC (Tetrahidrocannabinol). Son los cannabinoides con mayor presencia en la planta de cannabis, sin embargo, en la planta pueden existir más de 100 distintos tipos de cannabinoides.

CBD & THC

 
  • Uno de los más de 100 cannabinoides encontrados en la planta de cannabis, este compuesto es semejante a los endocannabinoides producidos por el mismo cuerpo, tomarlo no produce ningún efecto psicotrópico. Sus propiedades más destacadas son:

    • Anticonvulsivante

    • Desinflamatorio

    • Relajante muscular

    • Mejora de estado anímico

    Estas propiedades ayudan a tratar padecimientos como la epilepsia, tensión muscular, dolores causados por inflamación, estrés, ansiedad y ayuda a mantener un mejor descanso después de conciliar el sueño, entre otras más.

  • Otro de los más de 100 fitocannabinoides encontrados en la planta de cannabis, en comparación al CBD este cuenta con otras propiedades y es el responsable de que la planta de cannabis sea tan popular, pero estigmatizada.

    Este compuesto presenta propiedades analgésicas, genera sensación de somnolencia, hiperfagia (incrementa el apetito) y produce un efecto psicotrópico, el cual se puede presentar como distorsión del tiempo, buen humor y sensación de relajación o pesades corporal. Cuando es una dosis alta para una persona primeriza, los efectos pueden ser más pronunciados y al ser una nueva experiencia puede generar una sensación de estado de alerta o incluso taquicardia sinusal.

    Las propiedades que ofrece el THC ayudan a tratar principalmente dolor, insomnio y falta de apetito.

    La única manera de aprovechar el THC sin que presente un efecto psicotrópico es usándolo de forma tópica.